Por: Jesús Fernando Sandoval Esparza
Después de dos días de lluvia y viento a causa del huracán Jova en la ciudad de Colima, se realizó un recorrido por partes del estado para captar los daños y reacciones causadas por la tormenta.
Avenidas quedaron con gran cantidad de agua encharcada lo cual provocaba que automovilistas manejaran con precaución para evitar accidentes viales, también a consecuencia de estos transeúntes tenían que cruzar las avenidas con cuidado para evitar ser mojados por los automovilistas.
El huracán llevó a las autoridades correspondientes a que se suspendieran las clases durante tres días y las escuelas lucían así sin movimiento tanto de alumnos como los distintos trabajadores de las instituciones académicas.
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Arboles derrumbados que impedían el paso en algunas de las calles del la ciudad, sobre todo los que se encontraban cerca de un río.
Para los pepenadores el huracán significó una nueva fuente de ingreso, este hombre buscaba bajo las aguas desechos que pudieran servir para el comercio y así conseguir un beneficio económico.
Por otro lado los niños se divertían con los escombros que jaló la corriente hasta las orillas de los distintos arroyos del estado.
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